EL ASCENSO DE SKYWALKER, algunas opiniones
¿Se cierra un ciclo?
Ayer fuimos a ver "El Ascenso de Skywalker". El cierre de una saga que nos ha tomado más de cuarenta años (soy uno de los privilegiados que las ha visto todas-todas en cine, desde "Una Nueva Esperanza" en 1977 hasta esta que nos ocupa). Eso si Disney respeta el esquema original de Lucas de nueve capítulos y no se lanza a realizar otros más. Un final aceptable, sin ser los bodrios de las I, II y III y tampoco sin llegar a alcanzar las cotas de perfección de las dignas IV, V y VI originales (las "Espechal Edichon" NO).
Nos extrañó, eso sí, tantos baches argumentales y cabos sueltos en una superproducción que debiera estar planificada hasta el mínimo detalle, lo que nos sugiere una dirección errática y más pendiente de los "me gusta" de las redes sociales que de un guión coherente, personajes desarrollados y una historia sólida. Pero bueno, hay varias escenas de sables láser, disparos, muerte y destrucción que siempre son bienvenidas. Y se mantiene el gran acierto de las nueve películas en crear mundos atractivos, vestuarios convincentes y un aspecto característico para cada personaje, además de lo natural que nos parece la utilería y la dirección de arte.
La rebelión será ecológica y feminista o no será.
En la trilogía original, ya Lucas nos había sorprendido convirtiendo a la princesa de los cuentos de hadas, una mujer bella pero inútil, un lastre que deben arrastrar los héroes hombres, en la princesa Leia, que mandoneaba, lideraba y no dudaba en agarrar los fierros para charquearse a cuanto stormtrooper se cruzara en su camino, además de ofrecerse de voluntaria en una misión suicida y preocuparse más de liberar a la galaxia que de casarse con el chico guapo (igual logró ambas cosas). En la trilogía final es Rey [inserte aquí su apellido], la chica que realiza un recorrido similar a Luke Skywalker y que posee la Fuerza en un grado superlativo. El poder finalmente está en la mujer. Sus predecesores no fueron más que peldaños en su ascenso.
En toda la saga, generalmente son los buenos quienes tienen a la naturaleza de su lado, ya sean animales, seres primitivos o tropas de caballería. En la última entrega, incluso, vemos que son las naves de la Orden quienes emiten humo y contaminan.
La tiranía de las redes
Pasó con el infumable de Jar-Jar Binks, y ahora las víctimas fueron algunos personajes, como Rose, que prometía algo, pero casi desaparecieron por culpa de los troles de redes sociales. Loco, los realizadores de películas debieran hacer películas y no tratar de complacer a tanto gil. De hecho, las mejores de la saga fueron las realizadas en la época pre-internet. De haber existido Twitter en esa época seguramente habrían cancelado a C3PO o habrían cambiado a Leia por una rubiecita de ojos celestes a partir de la segunda película. Al final si haces filmes mirando el recuento de "me gusta", no te salen películas, te salen unos frankesteines sin mayor desarrollo.
Con el signo de los tiempos
Como decíamos al principio, he visto todas las películas de la saga en cine en la época de su estreno. En la trilogía original, realizada a finales de la Guerra Fría, nos era inevitable ver en el Imperio una metáfora de la dictadura y en los Rebeldes, un grupo de malandrines, aventureros y aficionados, a nosotros, que contra todos los pronósticos se enfrentaban al mal y [alerta espóiler] lo vencían. Un cuento de hadas de la época de Daniel López.
La siguiente trilogía fue durante los años de la Transición. Y fue muy en ese estilo; edulcorada, decepcionante y con unas transas de poder que dejaron a la Galaxia en manos del Emperador y a Chile privatizado de pies a cabeza.
Y con esta trilogía final no podemos evitar realizar otro paralelo con el Chile de nuestros tiempos. Es la época de la mujer y la ecología, pero además de la gente unida. Como dijo Poe (Dameron, no Edgar Allan), nos hicieron creer que estábamos solos, pero no. Y en la batalla final [alerta espóiler, amargados] los malos se sorprenden al no tener un ejército como rival sino solo a "gente". Muchos de los que acá ocupan las calles son los que allá, en esa galaxia lejana, atacan a la Orden. [Alerta espóiler, colorientos] El Emperador sobrevive conectado a cables y manifestándose de distintas formas, lo mismo que la dictadura, y ya es buena hora de que esto acabe.
Comentarios
Publicar un comentario